Por Ana María Cañizares, CNN en Español

Hablar de José Adolfo Macías Villamar, más conocido como Fito, es hablar de uno de los criminales más temidos del Ecuador. Fue capturado por las autoridades de Ecuador el 25 de junio, según informó el presidente Daniel Noboa.

El criminal logró poner en jaque al sistema de seguridad desde hace varios años, pero, sobre todo, desde enero de 2024, cuando el Gobierno confirmó que este hombre, líder de la banda Los Choneros, se fugó de la Cárcel Regional de Guayaquil, aunque sin determinar la fecha exacta de su evasión de los controles penitenciarios.

La fuga de Fito, quien cumplía una sentencia de 34 años de prisión por delitos como tráfico de drogas y homicidio, desató de inmediato una escalada de violencia en Ecuador que dejó a su paso atentados con explosivos en distintos puntos del país, enfrentamientos entre grupos criminales, la abrupta incursión de un grupo delictivo en un canal de televisión guayaquileño por parte de un grupo delictivo, retención de agentes penitenciarios y policías, tensión en las cárceles y el terror sembrado en la población producto del ambiente hostil.

El presidente Daniel Noboa —que llevaba apenas un mes y medio en el poder— declaró el 9 de enero de 2024 el estado de conflicto interno armado en Ecuador y catalogó a Los Choneros y a otras 21 organizaciones criminales de terroristas. Un día antes, Noboa había decretado el estado de excepción en el país tras conocerse que Fito ya no se encontraba en su celda y dispuso un amplio despliegue militar y policial para su búsqueda.

José Adolfo Macías Villamar es originario de la ciudad de Manta, ubicada en la provincia de Manabí, uno de los principales puertos del país. Desde allí el crimen organizado ha ganado terreno en su disputa por controlar territorios para el tráfico de drogas.

Fito es el último cabecilla de la banda de Los Choneros puesto que anteriormente el liderazgo de este grupo criminal estuvo antes a cargo de otros dos miembros que fueron asesinados. Primero Jorge Luis Zambrano, alias “Rasquiña”, que fue abatido a tiros en un centro comercial de la ciudad de Manta en diciembre de 2020; y luego Junior Roldán, alias “JR”, asesinado en Colombia en mayo de 2023. Zambrano y Roldán murieron tras obtener la libertad condicional, según reportes de la Fiscalía y el Ministerio del Interior de Ecuador.

Tras sufrir esas dos bajas, la Policía identificó a “Fito” como el líder máximo de Los Choneros y uno de los responsables de varios de los hechos de violencia y masacres perpetradas dentro y fuera de las prisiones.

Durante el Gobierno del entonces presidente Guillermo Lasso, el 12 de agosto de 2023, en un fuerte operativo policial y militar, alias “Fito” fue trasladado, junto a otros presos de alta peligrosidad, de la Cárcel Regional de Guayaquil al centro penitenciario de La Roca “como medida de seguridad para los ciudadanos”, según dijo Lasso.

Sin embargo, 27 días después, un juez decidió revertir la decisión y ordenó, en medio de cuestionamientos y la indignación del Gobierno anterior, el retorno de “Fito” a la Cárcel Regional de Guayaquil, de donde se fugó en enero de 2024.

La banda criminal de Los Choneros es considerada una de las agrupaciones delictivas más antiguas del país cuyo origen se remonta a finales de los 90. Un informe de la Dirección de Investigación Antidrogas de la Policía de Ecuador, apoyado por el Observatorio Ecuatoriano de Crimen Organizado y la Fundación Panamericana para el Desarrollo en Ecuador, difundido en julio de 2023, indica que Los Choneros nacieron en 1998 con actividades de microtráfico en la ciudad de Manta, provincia de Manabí. En 2003 este grupo criminal se apoderó de la ruta del tráfico de drogas en Manabí, siendo el encargado de trasladar la droga desde Colombia hasta la zona costera del Ecuador.

Sus actividades criminales se han ido ampliando con el tiempo, incluyendo delitos como extorsión, robo, tráfico de armas y sicariato. Esta agrupación mantiene serias disputas con bandas rivales como Los Lobos, Los Tiguerones y Chone Killers, precisa el informe.

Otras agrupaciones como Fatales, Gángster y R7 han sido identificadas por la Policía como brazos armados de Los Choneros.

Los Choneros han controlado durante los últimos años algunos de los pabellones de prisiones como la conflictiva Penitenciaría del Litoral ubicada en Guayaquil para sumar recursos a su economía criminal. El informe policial señala que desde el interior de las prisiones los líderes de los pabellones han coordinado actividades ilícitas para obtener réditos económicos a través de la extorsión y asesinatos de sus adversarios.

En los últimos años, Los Choneros se encargaron de difundir en redes sociales, y en diferentes ocasiones, videos y fotografías de las condiciones privilegiados en las que vivía Adolfo Macías en la Cárcel Regional de Guayaquil, sin que el servicio penitenciario haya podido despejar las interrogantes que surgieron en su momento sobre cómo se concedían permisos y accesos para gozar de beneficios.

Algunos de los videos mostraban a Fito dando una rueda de prensa en uno de los patios de la prisión, en otro celebrando su cumpleaños con música y pirotecnia, luego protagonizando junto a un grupo musical un video con una canción creada para él tan solo unos pocos días antes de ser trasladado a la prisión de máxima seguridad de La Roca en septiembre de 2023.

Luego de su fuga, en enero de 2024, se viralizó un video que mostraba las condiciones en las que personal de Fuerzas Armadas encontraron la celda de Fito, la cual contaba con una ducha personal, una refrigeradora y conexiones de comunicación.

El presidente Daniel Noboa repudió las condiciones de privilegio en las que vivía Fito en la cárcel y pidió una investigación al personal penitenciario por presunta complicidad. Noboa aseguró que hubo una filtración de información que alertó a Fito sobre el plan de las autoridades para trasladarlo nuevamente a la cárcel de máxima seguridad de La Roca que se ubica en la parte posterior de la Cárcel Regional.

En febrero de 2024, el Departamento del Tesoro de EE.UU. sancionó a la banda delictiva Los Choneros y a su líder, Adolfo Macías alias “Fito”, por sus actividades de narcotráfico y la violencia que generan en Ecuador y en todo el continente.

“En prisión, Macías Villamar se benefició de acceso a teléfonos celulares e internet, lo que le permitió seguir dirigiendo las actividades de Los Choneros y publicar comunicaciones externas, incluido un video musical que circuló en las redes sociales en el que desafiaba al gobierno ecuatoriano”, detalló el Departamento del Tesoro de Estados Unidos al emitir sanciones contra Fito y su banda.

Las sanciones, emitidas a través de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), consisten en bloquear las propiedades vinculadas con Los Choneros o con Macías. El Gobierno de Estados Unidos prohíbe así que cualquier ciudadano estadounidense realice transacciones con entidades ligadas a Los Choneros.

“La medida es parte de una iniciativa del Gobierno por combatir la amenaza global que representa el tráfico ilícito de drogas a Estados Unidos, que está causando la muerte de decenas de miles de personas al año, así como un sinnúmero de sobredosis no mortales”, enfatizó.

El Departamento del Tesoro afirma que Los Choneros cuentan con el apoyo del cartel mexicano de Sinaloa para controlar las principales rutas del tráfico de cocaína a través de Ecuador.

“A cambio de esto, Los Choneros presuntamente proporcionaron servicios de seguridad y logística al cartel de Sinaloa”, precisa el departamento estadounidense.

Luego de que “Fito” evadiera los controles de la Cárcel Regional de Guayaquil, la Policía y las Fuerzas Armadas emprendieron una incesante búsqueda a través de operativos conjuntos para golpear la estructura criminal de esta peligrosa banda, logrando la detención de varios integrantes considerados de “alto y mediano valor” por la fuerza pública y la deportación desde Argentina de familiares y allegados a Los Choneros.

Con el fin de lograr su captura fue habilitada la línea telefónica 131 en Ecuador y un correo electrónico del Plan de Recompensas para que quienes tuviesen información valiosa sobre el paradero del líder criminal pudieran proporcionarla de forma confidencial a través de esos canales de comunicación. Fito estaba también en la lista de los más buscados del país.

Continuamente la Policía y las Fuerzas Armadas han venido informando sobre la ejecución de allanamientos a propiedades vinculadas a Los Choneros y a familiares de alias Fito —incluyendo una de sus parejas y su hermano— en varios puntos del país, sobre todo en Manabí.

A finales de mayo de 2024, el presidente Noboa dispuso el traslado temporal de las sedes de los comandos de las Fuerzas Armadas, de la Policía y de las instituciones que se considere necesario a la ciudad de Manta (bastión de Los Choneros), debido al recrudecimiento de la violencia y los enfrentamientos entre bandas criminales. Allí se conformó un Centro de Operaciones que ha dispuesto acciones coordinadas para combatir a Los Choneros y otros grupos criminales en la zona.

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