Por Pamela Brown, Jeremy Herb y Shoshana Dubnow, CNN

El mes pasado, una multitud se reunió un domingo por la mañana en el piso de arriba de un antiguo bar a tres cuadras del Capitolio de Estados Unidos para inaugurar formalmente una nueva iglesia.

El servicio religioso inaugural de Christ Church Washington DC, una extensión de un movimiento evangélico con sede en Idaho, tuvo lugar en un edificio propiedad del Conservative Partnership Institute (CPI), un grupo de expertos codirigido por el exsecretario general de la Casa Blanca durante la primera presidencia de Donald Trump, Mark Meadows. En el techo todavía se veían expuestos los ladrillos y las tuberías. Había una bandera de Estados Unidos colgada sobre el escenario improvisado desde donde predicaba el pastor.

Minutos antes de que comenzara el servicio religioso, el secretario de Defensa Pete Hegseth entró con su esposa e hijos.

La apertura marcó un gran logro para Douglas Wilson, a pesar de que no estaba en Washington. Wilson es un pastor que se describe a sí mismo como nacionalista cristiano que, desde la década de 1970, ha convertido su iglesia evangélica en Moscow, Idaho, en una red internacional de más de 150 iglesias, así como también escuelas cristianas, una universidad y una casa editora.

En docenas de libros y años de publicaciones en blogs, Wilson aboga por la idea de que Estados Unidos debería adoptar una teocracia cristiana y adherirse a una interpretación bíblica de la sociedad. Él dice que la nueva iglesia en Washington es parte de esa misión.

“Todas las sociedades son teocráticas”, dijo Wilson en una entrevista con CNN en su Christ Church en Idaho. “La única pregunta es ¿quién es ‘Theo’? En Arabia Saudita, Theo es Alá. En una democracia secular, sería Demos, el pueblo.
En una república cristiana, sería Cristo”.

Wilson cree en una sociedad patriarcal donde se espera que las mujeres se sometan a sus maridos. Las mujeres tienen prohibido ocupar puestos de liderazgo en su iglesia. Apoya la derogación de la 19.ª Enmienda que otorga a las mujeres el derecho al voto (aunque dice que no es una prioridad), quiere prohibir el aborto y dice que la homosexualidad debería ser catalogada como un delito.

Si bien ha estado al margen de la derecha religiosa durante décadas, Wilson ha encontrado una audiencia republicana cada vez más convencional bajo Trump. Durante la pandemia de Covid-19, su iglesia en Moscú desafió las reglas de cierre y realizó una protesta al aire libre en septiembre de 2020, lo que provocó arrestos, la atención nacional y el apoyo de Trump en Twitter. Su comunidad eclesiástica en Idaho casi se ha duplicado desde el 2019, dice.

El año pasado, Wilson fue entrevistado en el podcast de Tucker Carlson y habló en la cumbre “The Believers’ Summit” de la organización sin fines de lucro Turning Point USA de Charlie Kirk.

“Mis puntos de vista sobre una serie de cosas han sido aceptados por más personas y ha sucedido sin que yo mueva un dedo”, dijo Wilson.

Ahora, con una Oficina de Fe de la Casa Blanca recién creada y el hecho de que Hegseth instituyera servicios de oración mensuales en el Pentágono, Wilson es parte de un grupo creciente de líderes religiosos cristianos que encuentran influencia entre los conservadores de MAGA.

“Realmente hay todo un movimiento entre estas personas”, dijo Matthew Taylor, un académico cristiano sénior del Institute for Islamic-Christian-Jewish Studies (Instituto de Estudios Islámicos-Cristianos-Judíos), que una organización educativa sin fines de lucro que aboga por la diversidad religiosa. Taylor dice que a menudo se les conoce como los “Theo Bros”.

“Casi siempre son hombres influencers. Son pastores, generalmente con una gran barba, que predican teología calvinista firme”, dijo Taylor. “Y Doug Wilson es el avatar o cabecilla de esa multitud”.

Los críticos de Wilson señalan una letanía de sus puntos de vista que, según argumentan, están muy fuera de la corriente general de lo que opina la gente, y dicen que están preocupados por la influencia que ha acumulado.

“De hecho, literalmente quieren apoderarse de pueblos y ciudades, por lo que están construyendo una infraestructura de base para hacerlo. Y tienen acceso a este Gobierno”, dijo la reverenda Jennifer Butler, quien fundó Faith in Public Life, una red de líderes religiosos progresistas. “Si eres judío, si eres musulmán, si eres mujer, si eres gay, (quieren criminalizar a las personas LGBTQ), no perteneces a esta sociedad”.

Wilson no se disculpa por sus puntos de vista ni su teología, aunque señala que escribe con una “acidez” que motiva a quienes no están de acuerdo con él. Dice que ha adoptado el término “nacionalista cristiano” porque es mejor que los otros nombres que le ponen.

“No soy un nacionalista blanco. No soy fascista. No soy racista. No soy misógino, y así es que se refieren a mí generalmente “, dijo. “Y luego, cuando alguien dice, bueno, eso es nacionalismo cristiano, está bien, eso lo puedo aceptar eso”.

El próximo mes, Wilson irá a Washington para hablar en un evento organizado por su iglesia, “Cristo o Caos”, que se llevará a cabo en el campus de la Universidad George Mason en Arlington, Virginia. También predicará en un servicio religioso allí al día siguiente.

El seguidor público más prominente de Wilson en la administración Trump es Hegseth, quien es miembro de una iglesia en Tennessee que forma parte de la red de Wilson, conocida como la Comunión de Iglesias Evangélicas Reformadas (CREC por sus siglas en inglés).

Cuando Hegseth celebró su primer servicio de oración cristiana en el Pentágono, trajo al pastor de Pilgrim Hill Reformed Fellowship, su iglesia en Tennessee. Hegseth dice que se mudó allí en 2022 para enviar a sus hijos a una escuela que es parte de una red cristiana que Wilson ayudó a fundar.

Si bien Wilson no se reunió con Hegseth hasta que fue confirmado como secretario de Defensa, el pastor dice que es “muy alentador” ver la forma en que Hegseth ha “asumido lo que cree”, que ha incluido la purga de DEI (Las Políticas de Diversidad, Igualdad e Inclusión) y las llamadas políticas “woke” de las fuerzas armadas.

Cuando se le preguntó sobre el controvertido pasado de Hegseth, incluidas las numerosas infidelidades matrimoniales, así como las acusaciones de consumo excesivo de alcohol y agresión sexual, que Hegseth ha negado, Wilson admitió que: “Su pasado es bastante irregular”.

Pero ahora, Wilson dice que: “Pete Hegseth vive como debe vivir un hombre cristiano”.

Wilson describió como “muy agradable” el primer encuentro de ambos en Tennessee, en mayo, en la iglesia CREC donde asiste Hegseth.

En una declaración a CNN, el portavoz del Pentágono, Sean Parnell, dijo: “El secretario es un miembro orgulloso de una iglesia afiliada a la Congregación de Iglesias Evangélicas Reformadas, que fue fundada por el pastor Doug Wilson. El secretario valora mucho un sin número de los textos y enseñanzas del Sr.
Wilson”.

La iglesia de Wilson ya se ha beneficiado de que Trump sea presidente. En mayo, el Departamento de Justicia intervino en nombre de la iglesia, demandando a la ciudad de Troy, Idaho, porque había denegado la solicitud de la iglesia para operar en un antiguo edificio bancario, citando problemas de estacionamiento y tráfico debido a su ubicación en el distrito comercial de la ciudad.

La demanda del Departamento de Justicia acusa a la ciudad de discriminación religiosa.

En una publicación de blog de mayo titulada “A Mission to Babylon” que anunciaba la apertura de la nueva iglesia en Washington, Wilson escribió que habría “muchas oportunidades estratégicas con numerosos evangélicos que estarán presentes tanto en la administración Trump como en sus alrededores”.

“No estamos plantando la iglesia para poder conocer a senadores y personas importantes. Lo que estamos haciendo es plantar una iglesia para que las personas importantes en Washington recuerden que Dios es el importante. Y lo que importa es el favor de Dios”, dijo Wilson a CNN. “Allí tenemos varias personas que están en conexión con nosotros, y queríamos que tuvieran disponible un servicio religioso cerca”.

La congregación en Washington de Wilson se reúne en el piso de arriba de un bar cerrado, que era popular entre el personal del Congreso, el Capitol Lounge, donde viejos recuerdos políticos todavía cubren sus paredes oscurecidas.

El hecho de estar ubicado en ese lugar subraya las conexiones que el sitio tiene con la base que apoya a Trump en Washington. El edificio es uno de varios situados cerca del Capitolio comprados por CPI mientras Trump no estaba en el poder.

Encabezado por Meadows, ahora un poderoso agente de MAGA de Washington, y el ex senador republicano Jim DeMint, el CPI está en el núcleo de una red de organizaciones de defensa conservadoras, incluido el Center for Renewing America, creado por el director de presupuesto de Trump, Russ Vought, y America First Legal, una operación con fines legales cofundada por el actual secretario general de la Casa Blanca, Stephen Miller.

Cuando se le preguntó cómo la iglesia terminó usando el edificio de CPI, Wilson dice que un amigo en Washington hizo el contacto. (CPI no respondió a una solicitud de comentarios).

Wilson dice que estaba agradecido porque hubiera habido un primer Gobierno de Trump y por el nombramiento de tres jueces conservadores en la Corte Suprema, lo que llevó a la derogación de Roe vs. Wade. Ahora, en el segundo Gobierno de Trump, quiere que el tribunal superior derogue la decisión de 2015 que legalizó el matrimonio gay en todo el país.

Cuando se le preguntó cómo encaja el presidente en su misión, Wilson dice: “Trump es la bola de demolición. Él es el comodín. Él es, él es lo que nadie realmente esperaba”.

En persona, Wilson, de 72 años, tiene la apariencia de un abuelo sincero y apacible con una espesa barba blanca. Tiene tres hijos adultos, todos miembros de la iglesia CREC. (Según las reglas de la iglesia, si sus hijos dejaran la iglesia, él no podría estar a cargo, bajo la filosofía de que, si no puedes ser líder en tu casa y dirigir a tus hijos, no puedes liderar la iglesia).

Wilson cree en el posmilenialismo, eso significa que cree que el trabajo de los cristianos es construir el reino de Dios en la Tierra para lograr la segunda venida de Cristo. Dice que su teología se enfrenta a una sociedad secular más amplia, que es la que ha predominado en Estados Unidos.

Christ Church fue fundada en Moscow, Idaho, en la década de 1970 por el padre de Wilson, un evangelista que había instalado a su familia allí. En esa época el joven Wilson acababa de completar un período de servicio en la Marina y asistía a la universidad en Moscow, y relata que se convirtió en el predicador principal de la incipiente iglesia después de aproximadamente un año y medio cuando el predicador regular se mudó a otra ciudad.

Moscow es una ciudad universitaria, donde está la sede de la Universidad de Idaho. Allí se aprecian las claras fuerzas que compiten entre sí en su idílica franja de negocios a lo largo de Main Street. Las cafeterías y librerías que exhiben banderas del orgullo gay y letreros de “Black Lives Matter” están junto a negocios propiedad de “kirkers”, que es como los miembros de la congregación de Wilson se llaman a sí mismos. “Kirk” significa iglesia en escocés (el sitio web de Christ Church es “christkirk.com”).

La notoriedad de Wilson se hace evidente muy pronto. Mientras caminaba por Main Street con una reportera de CNN, el dueño de una tienda de ropa vintage y discos llamada Revolver, abucheó con un “boo” a Wilson.

“Bueno, ahí lo ves”, dijo Wilson, sin inmutarse. “No es inusual”, dijo sobre ese tipo de recepción por parte de otros residentes de Moscow.

“Todo el mundo lamenta el hecho de que ya no tenemos un sentido de comunidad, y luego, tan pronto como comienzas a lograrlo, la gente comienza a tildarlo de culto”, dijo Wilson.

La presencia de la iglesia en la ciudad es difícil de pasar por alto. Además de Christ Church, Wilson comenzó hace más de cuatro décadas la Logos School, una escuela primaria y secundaria, cuando su hija mayor estaba en edad escolar. Wilson dice que fue la primera de lo que ahora son más de 400 “escuelas cristianas clásicas” en Estados Unidos.

Wilson también fundó New Saint Andrews College en la década de 1990, una pequeña universidad con programas educativos de cuatro años ubicada en la calle principal de Moscow.

Muy cerca de Christ Church se encuentra el edificio Canon Press. En él se exhiben obras de la rama editorial del imperio de Wilson, cerca de la pequeña cocina, se ve el póster de un libro publicado allí, “It’s Good to Be a Man: A Handbook for Godly Masculinity” (Es bueno ser hombre: Un manual de masculinidad divina).

La red CREC ahora tiene más de 130 iglesias en casi 40 estados de EE. UU. y otras 25 en todo el mundo: en Canadá, Polonia, Ucrania, Rusia y Australia.

Wilson dice que más que cualquier otra cosa, la pandemia de Covid-19 y la respuesta del gobierno es lo que impulsó el crecimiento de su iglesia. La gente fue “perseguida hasta aquí”, dice, por gobernadores de estados demócratas, las restricciones de Covid-19 y los pastores que cerraron sus iglesias en otros lugares.

Wilson dice que sus críticos que lo acusan de querer convertir a la sociedad estadounidense en una teocracia como en la serie “ The Handmaid’s Tale” malinterpretan su misión.

“Creo que todas esas personas, en la mayoría de los ámbitos de su vida, se sorprenderían de cuánta más libertad tendrían”, dijo Wilson. “Debido a que vivimos bajo un estado opresivo y tiránico que quiere regular la cantidad de agua que sale por el cabezal de mi ducha. Quieren regular qué tipo de bombilla puedo usar.
Quieren regular todo tipo de cosas, y eso también afecta a los musulmanes y a los hindúes”.

Pero los críticos de Wilson dicen que sus afirmaciones sobre los beneficios de una sociedad teocrática no son válidas para aquellos que no son cristianos, hombres o heterosexuales.

“Habría menos violaciones a la libertad individual por parte del gobierno, eso probablemente sea cierto”, dijo Julie Ingersoll, profesora de estudios religiosos en la Universidad del Norte de Florida.

“Pero con certeza, la iglesia tendría mucha más autoridad”, añadió. “Y las familias serían pequeños patriarcados. Estas personas han dicho a viva voz que no creen que las mujeres deban tener derecho al voto. Y en la CREC, las mujeres no votan. En todas las decisiones congregacionales que se toman, son los hombres los que votan en nombre de sus familias”.

Wilson y sus pastores dicen que apoyarían la derogación de la 19ª Enmienda, que otorga a las mujeres el derecho al voto, porque creen que cada hogar debería tener un solo voto, que haría el cabeza de familia (las viudas o las mujeres solteras aún les correspondería un voto, añaden).

“Esta es la clave de la manera en que vemos el mundo. Creo que el hogar es una unidad, por lo que el hogar debe tener un voto”, dijo Jared Longshore, pastor ejecutivo de Christ Church en Moscow, quien pronunció el sermón en la inauguración de Christ Church Washington el mes pasado.

“Normalmente sería yo quien votaría por mi familia, pero lo haría después de haberlo discutido con mi familia”, dijo Toby Sumpter, otro pastor de Christ Church.

Los textos de Wilson sobre el sexo y el matrimonio han provocado críticas debido a la percepción de que su teología abre la puerta al abuso conyugal e incluso a la violación conyugal. En un pasaje de su libro de 1999 titulado “Fidelity: What it Means to be a One-Woman Man” (“La Fidelidad: lo que significa ser un hombre monógamo”), Wilson escribe: “Un hombre penetra, conquista, coloniza, planta. Una mujer recibe, se rinde, acepta”.

Wilson insistió a CNN que su teología nunca ha apoyado el abuso sexual o conyugal, y dice que ha ayudado a las mujeres a escapar de relaciones abusivas.

“Si hay abuso sexual o abuso con violencia, u otras formas de mala conducta, creo que las autoridades, a veces los policías, a veces los adultos mayores de la iglesia, a veces otros miembros de la familia, incluso miembros lejanos de la familia deben intervenir para proteger a la mujer o proteger a los niños”, dijo Wilson.

Wilson aboga por poner fin al matrimonio homosexual legal y apoya las leyes que hacen ilegal la homosexualidad, señalando que la sodomía estaba prohibida en los 50 estados cuando él comenzó a predicar en la década de 1970.

“Ese Estados Unidos de esa época no era un infierno totalitario”, dijo Wilson.

Posiblemente su comentario más controvertido es sobre la esclavitud. Coescribió un folleto en la década de 1990 sobre la esclavitud en el Sur, que incluía la afirmación: “La esclavitud produjo en el Sur un afecto genuino entre las razas que creemos que podemos decir que nunca ha existido en ninguna nación antes o después de cualquiera de las guerras”.

Cuando se le preguntó si todavía cree que había afecto entre las razas, Wilson dijo: “Bueno, sí, depende de qué amo o de qué esclavo estés hablando”.

“La esclavitud fue supervisada y llevada a cabo por seres humanos deshonrados, y hubo abusos horrendos, pero también hubo personas que tenían esclavos que eran seres humanos decentes y no los maltrataban”, añadió. “Creo que ese sistema de esclavitud era un sistema no bíblico, y agradezco que haya desaparecido”.

Wilson dice que su visión de convertir a Estados Unidos en una nación cristiana significa que Cristo estaría “en la palestra pública”, pero otros aún así tendrían libertad de practicar sus propias religiones.

Dice que su objetivo final sigue siendo lograr una teocracia cristiana en todo el mundo, para facilitar la segunda venida de Cristo. Es un objetivo que todavía cree que está a unos 250 años.

“Sí, por medios pacíficos, compartiendo el evangelio”, dice sobre cómo sucedería.
“Aquí estamos haciendo un pequeño esfuerzo de mini-golf. Hay 8 mil millones de habitantes es la Tierra. Todavía hay mucho trabajo por hacer. Creo que estamos trabajando nuestra pequeña porción del viñedo”.

Wilson dice que es “muy alentador” ver a Hegseth defender sus creencias en Washington, mientras ocupa un alto cargo en la administración de Trump.

El servicio religioso de Hegseth en el Pentágono con un pastor de CREC “no estaba vinculado a nosotros en la parte de la organización, pero es el tipo de cosas que nos encanta ver”, dijo Wilson.

“Pero todos los que aman al Señor en Washington te dirán a cuántas cosas se enfrentan”, dijo Wilson. “Y este enfrentamiento no está ni cerca de terminar. Apenas ha comenzado”.

Esta historia ha sido actualizada para incluir el próximo viaje de Wilson a Washington.

The-CNN-Wire
™ & © 2025 Cable News Network, Inc., a Warner Bros. Discovery Company. All rights reserved.